Caño
El 2 de diciembre de 1916, siendo alcalde Manuel Lozano Herrero, se licita, con un bajo presupuesto municipal, la perforación del que sería el primero pozo artesiano en la villa, sin embargo, no se presentó ningún pocero.
El pleno de la corporación, al no disponer de suficientes fondos económicos, solicitó al Gobierno de España la totalidad del presupuesto para la perforación de un pozo artesiano. Era necesario para subsistir, no había agua corriente en las viviendas, solo una fuente de agua potable y de mala calidad para todo un pueblo que en esos años tenía unos 1.500 vecinos.
El 1 de octubre de 1918 la Dirección General de Agricultura concede la subvención con la ayuda del diputado por León en las Cortes Generales Mariano Alonso-Castrillo Bayón siendo alcalde Manuel Lozano Herrero. Con la subvención concedida, se licita y se adjudica por 5.740 ptas. al pocero Valeriano González Roperuelos que trabajó durante 22 días y cobró 6 ptas. cada día. La tubería vino de Bilbao. En la obra también trabajo Manuel Alvite que reclamó el pago de 53 metros de tubería de 2 pulgadas (477 ptas.), 86,5 metros de 3 pulgadas (1211 ptas.) y por el transporte de los 20 tubos de 3 pulgadas (25,15 ptas.). Tomás Martínez de La Bañeza reclamó el pago de 51,5 metros de tubería de 2 pulgadas. El lugar de la perforación fue junto al castillo y comenzó en el año 1919, convirtiéndose así en uno de los primeros pueblos en disponer de agua artesiana en la provincia, León capital la tuvo en 1932. El caño artesiano fue inaugurado en 1920 por el alcalde Ildefonso González García. También en el castillo y aprovechando las aguas sobrantes del caño, se construyó un abrevadero para que los animales pudieran beber y más abajo, ya cerca del arroyo, se construyó el lavadero donde antiguamente las mujeres acudían a hacer la colada con el agua también sobrante que bajaba del caño. Allí de rodillas refregaban la ropa de toda la familia, una labor realmente fatigosa que pocas veces hemos agradecido a nuestras madres y abuelas.
El 1 de julio de 1931, el Ministerio de Fomento nos concede un crédito de 7.000 ptas. para pagar los gastos que se debían del artesiano del castillo.
A finales de los 70, se destruye el caño original del castillo y los caños de la carretera ya que habían dejado de manar agua.
El 10 de agosto de 2017, un grupo de voluntarios comenzó en hacendera la recuperación y puesta en marcha del antiguo caño del castillo, una bonita fuente de 4 caños, réplica de su original construida en 1919. Todo con el fin de recuperar parte del patrimonio histórico de la villa y rendir homenaje a la fuente que supuso la supervivencia de nuestros antepasados. Para esta reconstrucción se eliminó la fuente de piedra construida a finales de los 90. También se recuperó el lavadero donde antiguamente las mujeres lavaban la ropa con la tabla y al que actualmente se le ha dado una función de estanque de peces con dos nenúfares, emblema de nuestro escudo y símbolo de identidad del arroyo “Los Reguerales” y las lagunas que en un pasado rodeaban nuestro pueblo.
El pleno de la corporación, al no disponer de suficientes fondos económicos, solicitó al Gobierno de España la totalidad del presupuesto para la perforación de un pozo artesiano. Era necesario para subsistir, no había agua corriente en las viviendas, solo una fuente de agua potable y de mala calidad para todo un pueblo que en esos años tenía unos 1.500 vecinos.
El 1 de octubre de 1918 la Dirección General de Agricultura concede la subvención con la ayuda del diputado por León en las Cortes Generales Mariano Alonso-Castrillo Bayón siendo alcalde Manuel Lozano Herrero. Con la subvención concedida, se licita y se adjudica por 5.740 ptas. al pocero Valeriano González Roperuelos que trabajó durante 22 días y cobró 6 ptas. cada día. La tubería vino de Bilbao. En la obra también trabajo Manuel Alvite que reclamó el pago de 53 metros de tubería de 2 pulgadas (477 ptas.), 86,5 metros de 3 pulgadas (1211 ptas.) y por el transporte de los 20 tubos de 3 pulgadas (25,15 ptas.). Tomás Martínez de La Bañeza reclamó el pago de 51,5 metros de tubería de 2 pulgadas. El lugar de la perforación fue junto al castillo y comenzó en el año 1919, convirtiéndose así en uno de los primeros pueblos en disponer de agua artesiana en la provincia, León capital la tuvo en 1932. El caño artesiano fue inaugurado en 1920 por el alcalde Ildefonso González García. También en el castillo y aprovechando las aguas sobrantes del caño, se construyó un abrevadero para que los animales pudieran beber y más abajo, ya cerca del arroyo, se construyó el lavadero donde antiguamente las mujeres acudían a hacer la colada con el agua también sobrante que bajaba del caño. Allí de rodillas refregaban la ropa de toda la familia, una labor realmente fatigosa que pocas veces hemos agradecido a nuestras madres y abuelas.
El 1 de julio de 1931, el Ministerio de Fomento nos concede un crédito de 7.000 ptas. para pagar los gastos que se debían del artesiano del castillo.
A finales de los 70, se destruye el caño original del castillo y los caños de la carretera ya que habían dejado de manar agua.
El 10 de agosto de 2017, un grupo de voluntarios comenzó en hacendera la recuperación y puesta en marcha del antiguo caño del castillo, una bonita fuente de 4 caños, réplica de su original construida en 1919. Todo con el fin de recuperar parte del patrimonio histórico de la villa y rendir homenaje a la fuente que supuso la supervivencia de nuestros antepasados. Para esta reconstrucción se eliminó la fuente de piedra construida a finales de los 90. También se recuperó el lavadero donde antiguamente las mujeres lavaban la ropa con la tabla y al que actualmente se le ha dado una función de estanque de peces con dos nenúfares, emblema de nuestro escudo y símbolo de identidad del arroyo “Los Reguerales” y las lagunas que en un pasado rodeaban nuestro pueblo.
Dirección
Plaza El Castillo
